ESPERANZAS

Me quedé pensando hoy en lo último que escribí. Hablé de la esperanza.
Hay veces que son tan contraproducentes las mierdas esas que logran que estemos días, semanas, meses y hasta años! aferrados a alguna. Sonriendo de vez en cuando, siendo felices de a ratitos. Nos rompemos el orto tratando de "superar" cosas, relaciones, afectos, rupturas, etc., y viene una de estas mierditas y se nos vuelve a instalar,eso en el mejor de los casos, porque en general no "vuelve", sino que continua instalada.
Buscando en mis libros encontré algo que me parece acertado, dice:
"Y como las esperanzas tienen ese destino que cumplir, nacer unas detrás de otras, por eso, pese a tantas decepciones, todavía no se han acabado en el mundo..."
En los últimos años de mi vida hay una en particular que se me hace casi imposible desterrar. Es gracioso (desde algun punto ácido de verlo), hice siempre "lo que tenía que hacer", no me di el gusto, el placer, de hacer alguna cagada. Desde lo racional me comporté maravillosamente. ¿Y qué carajo hago con eso? ¿Para qué me sirve si sigo teniendo adentro varias cosas para vomitar, para hablar, decir??, palabras, palabras, palabras!! Palabras que necesito expulsar y que un otro las escuche y haga lo que quiera, pueda con ellas! Me la fumé durante años, de hecho me la sigo fumando... Hasta cuando??? (referencia a Capusotto).
Y acá es donde surgen los mil millones de miedos... para poder hablar, o sea ser emisor de un mensaje, necesito un receptor, específicamente a "el" receptor. Me he ocupado con esmero de ahuyentar al receptor.
Tendré que seguir pensando. O dejarme de joder y actuar de una puta vez.